EL SEÑOR DEL PARAGUAS
En el sol, el señor Chaparroni espera ansioso la llegada de lluvia. Y siempre que no hubo lluvia, después se largó. Acá también.
Entonces nuestro protagonista se viste para la ocasión –se disfraza, lo exagera–: impermeable, botas, guantes y paraguas maravilloso. El señor Chaparroni es enteramente feliz de poder ayudar a la gente desprevenida con su paraguas antiempapamiento, que cuenta incluso con luces para alumbrar la noche y con aire caliente para combatir el frío.