EL TESORO SUBTERRÁNEO
A los once años, Leandro acaba de mudarse, con sus padres, desde Formosa a Buenos Aires. Buscan un destino mejor, aunque por el momento tengan que hospedarse en una pieza de hotel. Leandro, que va de asombro en asombro, conoce a Fernando, un ciruja que persigue un sueño, y a Gabriel, un chico de la calle. Los tres, convertidos en buscadores, vivirán juntos la mayor aventura de sus vidas.
KOMOREBI
Los enormes claustros del Colegio Nacional de Buenos Aires son el escenario de una búsqueda dramática. Un profesor se obsesiona con un personaje que aparece en los pasillos y en las aulas, y que solo él parece ver. La biblioteca, el archivo de legajos, algunos docentes históricos y varios exalumnos lo ayudan a reconstruir la vida de un chico que, terminando de cursar el tercer año, desapareció para siempre. En japonés, la expresión komorebi sirve para referirse a la luz del sol que se filtra entre las hojas de los árboles. En esta novela, la luz se filtra por las ventanas del majestuoso edificio y por las voces que el docente encadena. En cada palabra vibra esa otra, gritada con un dedo imposible en los pizarrones de la planta baja: “Buscame”.
LUCIANO, EL ELEFANTE CELESTE
Es sabido que, para un elefante, por más orejas chicas que tenga, ser celeste puede ser un problema. Tan sabido es que hasta el tío de Azucena, la gaviota amiga de las estrellas, tiene algo para contarnos sobre eso.
Acá te esperan Luciano y Azucena, el mono sabio y la estrella de mar, junto a una boya naranja, o debajo de un árbol de marulas. ¿Cómo hacer para encontrarlos? Es fácil, sólo se trata seguir el vuelo distraído de Azucena, o los pasos gordos de Luciano
PIEDRA LIBRE
Paula y Marcelo eran novios desde los once años. En 1976 tenían dieciséis, y su noviazgo ya prometía descifrar varios misterios. Tenían el tiempo, la ciudad, el mundo a su disposición. Pero el 24 de marzo todo cambió. Poco después, Paula y sus padres se exiliaban en el extranjero y Marcelo se veía empujado a huir al interior. Esta es la historia de ese viaje: uno que todavía no termina.
TODA LA VERDAD SOBRE LOS MONOS AULLADORES
EL QUE NO SALTA ES UN HOLANDÉS
A fines de 1977, a los doce años, Pablo llega a Buenos Aires desde Mar del Plata, su ciudad natal. Sus padres se han separado y extraña a su madre, a su hermana, a sus amigos. El desarraigo, la separación de la familia y el inicio de la adolescencia pegan fuerte. Pablo encuentra refugio en la euforia futbolera por el inminente Mundial y en la amistad de una vecina, Delicia Jansen, hija de una familia de holandeses. En la final de la copa, que Argentina juega con Holanda, el cantito preferido de la hinchada es el que da título a este libro. Los Jansen también cantan, sin sospechar la amenaza que los acecha, que los golpeará de lleno, rompiéndoles el corazón. Pablo, que sueña con ser escritor, que empieza a conocer el amor, deberá aprender a discernir entre lo real y lo aparente, entre lo superfluo y lo que será importante desde entonces y para siempre
HISTORIAS DE ABUELAS
Amauta tiene el orgullo de publicar este libro, que reúne doce biografías ficcionalizadas de doce Abuelas de Plaza de Mayo. De ellas, como de la mayoría de sus compañeras, se conocen episodios brutales que marcaron sus vidas, su lucha por devolverles la identidad a sus nietos y el resultado de sus búsquedas. Pero poco se conoce de sus infancias, de sus juventudes y de su infatigable participación en la organización, compartiendo tristezas y alegrías, nostalgias y festejos, renovando juntas las fuerzas para seguir haciendo lo que se debe hacer. Aquí se cuentan algunos trazos de esas historias, duras y hermosas, como todas ellas
LA SOGA
Un pedazo de soga, cómplice involuntario de un crimen ocurrido en la Edad Media, es testimonio de una línea histórica hecha de crueldad y abuso, una línea que atraviesa los tiempos y los continentes. En las mazmorras de la dictadura, una joven embarazada sabe muy bien cuál es el destino que le espera. Sabe que le arrebatarán a su hijo, pero también confía en que el camino de maldad, esa sucesión de perversidades que la soga testimonia, terminará, necesariamente, cuando se imponga la verdad y la justicia. Pocos años después, las paredes de Aluminé, en Neuquén, comenzarán a hablar su idioma de memoria y pintura, para que un chico recupere su identidad
