ANDAR ENTRE LIBROS
Convencida de que los libros son los mejores colaboradores de los maestros en la educación lectora y literaria, Teresa Colomer con Andar entre libros intenta contribuir a la construcción de un marco de actuación educativa que se alimenta tanto de los avances teóricos como de la aplicación práctica.
El libro está organizado en dos partes. La primera se dedica a los tres aspectos que interactúan en el proceso de la educación literaria: la escuela, los lectores y los libros; la segunda plantea la interrelación de estos elementos con cuatro posibilidades de lectura que ayudan a los docentes a programar sus actividades de animación lectora: las lecturas individual y colectiva, su expansión a distintas áreas del conocimiento, así como la escuela como guía experta en la interpretación de los textos.
Andar entre libros constituye una obra de consulta esencial para quienes se interesan en innovar sus actividades de promoción de la lectura dentro de las aulas e incluso fuera de ellas, pues describe "la manera en que tanto libros como docentes trabajan en conjunto para elaborar un itinerario de lectura que permita transitar a las nuevas generaciones hacia las posibilidades de comprensión del mundo y disfrute de la vida que abre la literatura"
NUEVOS ACERCAMIENTOS A LOS JÓVENES Y LA LECTURA
¿Es verdad que la lectura ha perdido valor para la juventud ante el crecimiento de la cultura audiovisual? Para poder responder a esta pregunta es imprescindible darle la voz a los propios jóvenes. También comprender el sentido de sus palabras. Distanciada tanto de los estudios que centran su atención en el análisis de las obras como de los acercamientos estadísticos al fenómeno de la lectura, y alejada de la tónica catastrofista o nostálgica común en los discursos contemporáneos sobre el tema, este libro es el resultado de una investigación llevada a cabo en Francia con jóvenes de barrios marginales, para los cuales la lectura significó un cambio profundo en sus vidas.
Con una sólida formación en ciencias sociales, Michèle Petit consigue en esta obra un acercamiento inteligente y clarificador a una comprensión profunda del sentido vital de la cultura: la dimensión humana de un sujeto que -en un sillón, una cama o un vagón de metro, solo o acompañado- encuentra en la frecuentación de la palabra escrita, la posibilidad de construir el sentido de su vida y participar en el mundo. El hecho de estar sustentados en la experiencia de personas precondicionadas a ser excluidas del mundo agrega validez a estos renovadores Nuevos acercamientos a la lectura y los jóvenes.
EL NIÑO REINVENTA LA ARITMÉTICA
COMO UNA NOVELA
Esta obra insólita, un auténtico estímulo para la lectura, ha sido uno de los grandes fenómenos de la edición francesa reciente. Pennac, profesor de literatura en un instituto, se propone una tarea tan simple como necesaria en nuestros días: que el adolescente pierda el miedo a la lectura, sea por placer, que se embarque en un libro como en una aventura personal y libremente elegida. Todo ello escrito como un monólogo desenfadado, de una alegría y entusiasmo contagiosos: "En realidad, no es un libro de reflexión sobre la lectura -dice el autor-, sino una tentativa de reconciliación con el libro".
Este antimanual de literatura concluye con un decálogo no de los debederes, sino de los derechos imprescindibles del lector (derecho a no terminar un libro, a releer, etc., incluso a no leer).
LA COCINA DE LA ESCRITURA
Escritoras, Escritores, Cocineros y aprendices todos, Tengo el gusto de presentarles La cocina de la escritura, un manual de redacción para todos aquellos que escriben ¡o deberían escribir!. Si ustedes son empleados de una empresa y tienen que redactar, si son estudiantes que se juegan el futuro en los exámenes, profesores que los corrigen o literatos en potencia, éste puede ser un libro con el que aprender a escribir, al que pueden llegar a querer y al que seguro que terminarán aborreciendo. Si ustedes están fascinados por la escritura, si odian escribir o si se parten de risa leyendo lo que escriben los demás, este libro puede ayudarles a experimentar con mucha más nitidez esas emociones. La cocina recoge lo más importante de la tradición occidental en redacción. Expone las investigaciones científicas más relevantes; las estrategias para buscar, ordenar y desarrollar ideas; la estructura del texto, o algunos trucos retóricos para encandilar al lector. Con ellas pueden aprender la técnica de la escritura... pero, desengáñense, eso no les convertirá en grandes escritores. ¡El talento no se enseña! Tienen en sus manos una cocina sin puertas, secretos ni tapujos. ¿Han entrado alguna vez en ella? ¿Les gustaría espiar al escritor? Pues adelante. ¡Pasen! ¡Entren en mi cocina! Encontrarán en ella un frigorífico repleto de comida: sucios borradores, fragmentos inacabados, ejempos, ejercicios e ideas para preparar sofritos. Está equipada con los artilugios más modernos (microondas descongelaideas, hornos para párrafos, licuaprosas y cuchillos cortafrases) sin olvidar las técnicas más populares (la inspiración al baño maría o la corrección con chino). El cocinero fue amante y pinche de la escritura. Aprendió a escribir hace más o menos veinticinco años (en una pequeña ciudad barcelonesa, con fecunda tradición de escritores), no ha parado de garabatear desde entonces y se gana la vida enseñando a escribir en una universidad. Tal es su obsesión por la escritura, que siempre lleva delantal y sólo consigue escribir sobre escribir o sobre cómo se enseña y se aprende a escribir. En fin, el plato que les ofrezco hoy es suculento y variado. Lo he preparado con esmero y confío en que les agrade. ¡Buen provecho! Gratinadamente, El jefe de cocina