UN MONTÓN DE BEBÉS
A la señora Sincola la fatigaba mucho cuidar a sus treinta bebés. El señor Sincola era maestro de escuela. Un día los señores Sincola deciden intercambiar sus actividades. Él tiene un día tremendo. Imagínense: ¡cuidar a treinta bebés no es algo que se aprenda de un día para otro! La señora Sincola, por otro lado, se la pasa muy bien, aunque extraña a todos sus bebés. ¡Definitivamente no le gustaría dejarlos todos los días!
¿Quién trabaja más duro: el padre ganando el dinero o la madre cuidando a los críos? En muchos hogares se han formulado esta pregunta. En ninguno ha habido una respuesta más divertida