JUAN Y SUS ZAPATOS
A Juan le gusta mucho caminar, por los cerros, por las milpas, por las huertas. Un día se subió a un guayabo y comió tanta fruta que se enfermó. Se tuvo que quedar en cama todo el día. Parecía que iba a ser muy aburrido... hasta que descubrió que sus zapatos tenían una vida propia. Después de esa noche, Juan mirará con otros ojos a sus zapatos.
El descubrimiento de nuevos y fantásticos mundos dentro del nuestro